martes, 16 de octubre de 2007

Capítulo 5. Conversaciones. PSOE

Las aguas bajan revueltas entre los afiliados del PSOE. Una parte sostiene que a lo mejor cuatro años en la oposición vienen bien para sanear y renovar el partido mientras otros son partidarios de mantener el gobierno como sea. Manuel Lagares es de la segunda corriente siempre que se matice que "como sea" no incluye la guillotina para nadie. O sea, para él. Viendo lo agitado de esa reunión informal que se ha formado en la Casa del Pueblo, Antonio Lagares filtra convenientemente el dato de que alguien del PSOE se ha reunido con CxB a espaldas del partido, dato que le aseguran mañana aparecerá en todos los periódicos. De repente se dejan las disputas sobre el futuro para darle caza al disidente.

A.L. La nota de prensa de CxB dice que es un dirigente del partido.

Bety. Pero esos confunden el tocino con la velocidad, puede ser cualquiera.

Vázquez Lorenzo. No creo que conozcan a la gente de la ejecutiva, hablarán de un concejal.

Pachico. ¡No sé cómo se te ocurre plantear esa posibilidad dudando de nuestra entrega al partido!

M.L. Primero debemos asegurarnos de que realmente es cierto que tenemos un disidente.

B. ¡Estos pretenden que nos creamos sus mentiras! ¡Es para desestabilizar el partido y que nuestros afiliados decidan plegarnos a su chantaje!

P. ¡Seguro que es eso!

Moncho. Debemos asegurarnos bien antes de dar un paso en cualquier dirección.

A.L. Si es cierto esto sin duda estamos ante un hecho muy grave.

P. Si alguien hace eso no merece llamarse socialista.

B. Debiéramos pedir su expulsión del partido.

M.L. Sería una traición al socialismo y a Betanzos, sea concejal o dirigente del partido.

A.L. Tiene que ser una prioridad dar con ese individuo que antepone sus intereses a los del partido.

M. ¡Que lo digas tú...!

A.L. Hay que erradicar la disidencia antes de que sea tarde. Los afiliados pueden decidir aceptar el chantaje y no podemos tolerarlo.

M.L. Aunque dimitiésemos, CxB apoyará igualmente al PP y no podemos hacer el tonto de esa forma.

María barral. ¡Eso!

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